VUELTA A CLASES
Es probable que los días previos al regreso a clases se manifiesten diversos síntomas físicos y emocionales, que acompañan este período de transición para el alumno y su familia.
Andar más irritable, no querer vestirse, resistirse a tomar desayuno, presentar vómitos o dolor abdominal, llantos y pataletas, pueden ser algunas de las respuestas que los menores manifiestan a la hora de entrar a clases.
Los que asisten por primera vez temen a lo desconocido y a separarse de sus padres.
Los alumnos regulares después de un larguísimo período de vacaciones les costará acostumbrarse a los horarios, exigencias y normas
Estas manifestaciones son normales y no deberían perdurar más allá de la segunda o tercera semana de clases.
Para ayudar a prevenir estas situaciones se recomienda:
1. Destacar el lado positivo de la vuelta a clases Realizar comentarios positivos cuando se acerca la entrada al colegio, refiriéndose a ello como algo entretenido.
2. Recuperar rutinas y horarios una semana antes de la entrada a clases. Es necesario comenzar a ajustar el horario de acostarse y levantarse temprano varios días antes, ya que el cuerpo necesita acomodarse al cambio de rutina. Una buena idea es adelantar la hora de dormir de los niños 15 minutos por noche, así como también, el horario de levantada.
3. Incluir a los niños en la compra de los útiles escolares. Para que la preparación del regreso a clases sea progresiva, se recomienda llevar a los niños a elegir su mochila, su estuche, los lápices y color de sus cuadernos.
4. Visitar el colegio. Para quienes vayan al colegio por primera vez, es muy importante hacer una visita antes de entrar a clases para familiarizarse con el establecimiento.
5. Indagar expectativas y promover el dialogo familiar en torno a temas relacionados a la vuelta a clases. Preguntar a los niños cómo se sienten acerca del regreso a clases. Demuestre que usted está enterado de lo que está pasando y que estará disponible para ayudar.
6. El ritual del día anterior a la entrada al colegio. Dado que el pensamiento de un niño en etapa escolar se caracteriza por ser concreto, es importante preparar juntos la mochila, colgar el uniforme que se usará, dejar listos los zapatos y la colación.
7. Evitar el estrés en las mañanas. Mientras más tareas se dejen preparadas en las noches, menos trabajosa serán las mañanas. Dejar preparada la mesa del desayuno, las colaciones, los bolsos de deporte, alivianan las rutinas en las mañanas.
8. El primer día. El primer día de clases es especial, sobre todo para quienes inician la escolaridad, por eso es recomendable marcar la diferencia y preparar un rico desayuno, que además sea nutritivo, y tomarlo sentados en la mesa.
Psiquiatra Andrea Aguirre
Pediatría El Alba